La empresa debe tener conciencia de los efectos positivos y negativos que el desarrollo de sus actividades genera en el medio ambiente.

La responsabilidad social de las empresas abarca su entorno local, y por lo tanto deben contribuir al desarrollo de las comunidades en que se insertan, integrándolas a sus actividades.

Su bienestar, la salud y seguridad laboral, el respeto a la diversidad, la relación con los grupos organizados y el desarrollo profesional son algunos de los temas que se desarrollan a lo largo de todo el capítulo de Calidad de Vida Laboral.